Primero, Animal Político nos presenta nuevamente un recuento bien hecho de los últimos acontecimientos políticos rumbo a la elecciones, se hace especial énfasis, por supuesto, en la agresión al perredista Guillermo Sánchez Nava y nos muestra un documento inquietante: presuntamente una foto del celular de Sánchez Nava al momento de ser atacado. Hay que leer el texto.
El siguiente es un artículo de fondo escrito por Ezequiel Flores Contreras para el diario Noroeste. En este escrito se hace un amplio recorrido por el marco de violencia criminal en el estado y pone especial énfasis en la actuación de los cuerpos policiacos, su presencia y relación con la ciudadanía, lo que (según el autor) puede influir en el día de la votaciones. Una visión panorámica de alguien que no está demasiado comprometido por la situación, con un título muy sugerente: En Guerrero, la política sabe a sangre.
Finalmente, un artículo de opinión de Manuel Camacho, que aunque es un personaje ligado a uno de los bandos le reflexión es concreta y documentada. El texto se publico en El Universal.
Esperamos sus comentarios, porque la democracia no sólo es votar.
El feto infernal
ResponderEliminarAPUNTES DE UN VIEJO LÉPERO
Jeremías Marquines
El Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE), condenó la agresión que sufrió por parte de un grupo de vándalos de la campaña del candidato del PRI, Manuel Añorve, el representante de la Coalición Guerrero Nos Une, ante el Instituto Electoral del Estado de Guerrero (IEEG), Guillermo Sánchez Nava y exigió a las autoridades que investiguen y castiguen.
Esta condena certifica que, efectivamente, Sánchez Nava fue agredido y está convaleciente en un hospital de la ciudad México. Asimismo, desmiente y reprueba la bestialidad y el dolo del candidato priísta que, junto con sus voceros, lanzó una campaña agresiva para tratar de desdibujar y distorsionar esta grave agresión que dejó medio muerto al representante de Ángel Aguirre ante el órgano electoral del estado. Muestra a los añorvistas en toda su ruindad y vileza, y alerta a los ciudadanos sobre el peligro que representa para los guerrerenses esa pandilla enferma.
La condena del IFE echa por tierra y exhibe a Manuel Añorve como el individuo nefasto y mentiroso que es, porque, efectivamente, al condenar la agresión, el máximo órgano electoral del país, da por sentado que ésta es real y no un montaje como dolosamente la calificaron los patanes de Héctor Astudillo, Héctor Vicario, Vicente Trujillo, y el lamebotas de Beltrones, el repudiado senador Jorge Castro Trenti.
Manuel Añorve ya está derrotado. Lo sabe la cúpula priísta que está convencida que sólo incendiando el estado de Guerrero puede detener la avalancha popular que apoya al jefazo Aguirre. El candidato bonsái fue derrotado por sus propias mentiras. Colmó la paciencia de los guerrerenses e insultó de forma abusiva la inteligencia del pueblo al que quiso pendejear. Los asesores del Choky abusaron en el uso del recurso de reversibilidad, a tal grado que ellos mismos terminaron desdibujados y percibidos como un verdadero peligro para la estabilidad y el desarrollo del estado.
En estos momentos, más de la mitad de los ciudadanos de Guerrero está consciente que Añorve representa la falsedad y la manipulación. El atraso y el robo descarado de los recursos públicos. Palabras identificadas con el viejo PRI: ese que cambia votos por despensas; ese asociado a las bandas criminales; el que pretende tratar como imbéciles a los ciudadanos; el que amenaza y recurre a la violencia para arrebatar elecciones; ese que tuerce la realidad como lo hicieron Figueroa y Vicario con el video de la matanza de Aguas Blancas; ese PRI que clona portadas de periódicos porque no aguanta la realidad y quiere imponer a la fuerza su propia visión; ese que exige la cancelación y promueve el linchamiento de espacios de comunicación críticos; ese que se gasta el dinero público pagando a periódicos prostituidos y a mercenarios y barbajanes que medio garabatean idioteces en los diarios de paga como el Novedades de Acapulco y montones de gacetillas y semanarios dirigidos por una jauría de imbéciles muertos de hambre. Ese PRI de los abusos de autoridad y de poder, el PRI de la impunidad y de la prepotencia; ese que anda desesperado, violento y agresivo tras ese feto malévolo que llaman Manuel Añorve, adoptado por una banda de pillos encabezada Carlos Salinas, Rubén Figueroa, Beatriz Paredes, Manlio Fabio Beltrones, Enrique Peña Nieto, René Juárez, Emilio Gamboa y varios cadáveres más, sacados de la ultratumba política.